viernes, 22 de febrero de 2013

Cuadros

A veces me olvido
que estuve embelesado con una pintura,
no dolería si la hubieran dibujado
con ojos cerrados,
o sí nunca hubiera
puesto un pie en
aquella muestra.

Cobarde, mi tatuaje
se esconde pegado
a mis vertebras
mientras mis dedos vacilan.

Algunas veces,
la única manera de ser,
es estorbando,
zumbar en tus oídos
es mi penitencia
por no haber aprendido
a darte cosas
que no pedías.

Desde abajo
no se oyen mis gritos,
en realidad estoy cantando,
es sobre una fecha
que está fugada
de los calendarios,
creo que era abril,
creo que era ayer.