miércoles, 20 de julio de 2011

Buenos

Nunca nos van a dejar,
festejemos extasiados,
separados.

Buenos momentos
en comodas cuotas
sacrifican la felicidad plena
de una simple vuelta de aguja.

Personas amables,
nuestras,
reciclan aquellos
espejos rotos.

La manía de ser
desconocido entre
paredes propias.

Un fogonazo azulado
extermina la duda
de aquellos que vomitan
flores y envuelven
cuerpos tibios,
cuerpos nulos.

Piezas abandonadas,
falsos recorridos,
pensar que un adorno
disimula murallas
insuperables.

La cobardía
de mirarse en el otro
sin sentirse
uno mismo,
y vivir
de fotos vetustas
sin rencores.

2 comentarios:

Ariel Rodríguez dijo...

Eugenio, estuve leyendo tus poemas (varios) y me gustaron mucho, medio repetitivo el tema pero se nota buena técnica e imágenes sugerentes.

Te felicito y te aliento a que sigas publicando!

De paso, te invito a pasar por mi blog de vinos, que además siempre tiene algún toque literario.

Saludos!

Insano dijo...

Gracias Ariel,me defendería del termino repetitivo diciendo que soy coherente con mi voz,pero probablemente haya sido falta de imaginación.Seguiremos publicando,gracias por la buena onda!
Sigo a los blogueros del vino y hasta tengo vino propio.Te felicito por tu blog.
Abrazo